domingo, 5 de mayo de 2019

Nuestro Macondo, sábado 4 de Mayo de 2019



ELENA MEDEL



Tara
I
La noche de tu muerte
Dios acribillaba a gargajos el cristal de mi ventana. La lluvia
     dolía igual que duele el frío en un cuento navideño
     con barrios de cartón. El viento
golpeaba las paredes, se colaba por las rendijas de la casa,
     helaba los armarios, componía con sus silbidos una
     nana que velase
por todas nosotras.
Escondida bajo la cama, me tapaba los oídos, negando la
     presencia del viento ante la puerta de mi cuarto.
Deberás superar doce pruebas para invadir mis dominios.
     No lo pondré tan fácil.

Me creía etimóloga de las condiciones atmosféricas, experta
     en acepciones.
Al lado de los miedos de mis quince años, cantaban las
     pelusas en un sueño de Sófocles:
     abre y verás cómo el frío te espera con su rostro de miedo, para
     decirte todo lo que no quieres saber. Abre y verás; porque
     el frío aguarda con su rostro de miedo para leer la biografía
     de tus manos.

Diluviaba más allá de la puerta cerrada de mi cuarto. El
     agua invadía las sábanas, traspasaba el somier, las pelusas
     desfilaban -pobres, densísimas- hacia la puerta.

Me tumbé, empapada, sobre el colchón.


Muy buenos días mis queridos Diversos. Ayer fue una mañana intensa de sábado en la que muchos versos y muchas risas nos acompañaron en la mesa del fondo del café de Macondo. 

Comenzamos con los poemas de Elena Medel, leímos varios: Aquello en lo que te fijas cuando salimos por las noches, Punto de partida, Poemas despedida para mi hermana y Tara, y la lectura actual y previa nos proporciona un debate sobre esta autora, lo cual está bien para comprobar que somos diversos y que la poesía y los poemas no nos gustan a todos por igual, había personas que pensaban que los poemas de Elena no tenían ritmo ni música, en cambio otras personas pensaban que era un soplo de aire fresco y una poética diferente, podríamos encuadrarla en poesía narrativa. Muy agradable la discusión y las diferentes opiniones, siempre está bien el debate. También leímos dos poemas de Salo Pasik, autor bonaerense contemporáneo, Ante el portal y Yo tuve una vez un mayo, sus versos nos hicieron viajar con la imaginación a tierras porteñas y recorrer sus veredas. 
Nos dedicamos a escuchar versos de los diversos. Escuchamos poemas de Paco (La duda, el infinito, tu lugar de descanso, tus sueños,..... la voz del viento poco a poco se fue apagando....), disfrutamos de estos versos románticos y de su fabulosa declamación. También aparecieron los versos de Rosalía, versos de comienzo de libreta turquesa ( No me gustan los peces, ni los cuentos de peces....), retrato de gustos y afinidades, como siempre rematados con cierre sorpresa de libreta. Y yo leí un poema con versos rescatados del olvido ( Cuando la tierra deje de dar vueltas, dejaré de quererte...). 
Recordar aquí también que el próximo viernes que será 10 de mayo nuestra Diversa, Yoli López presentará su último libro, A secuestradora de océanos, será en la Agrupación Cultural Alexandre Bóveda (Calle Olmos, 16, 1º) a las 20:00, una buena ocasión para compartir y disfrutar. 
Y al final de la mañana leímos dos poemas del cuentista y poeta estadounidense Raymond Carver (Último fragmento y Mi mujer) y nos pareció que estaría bien tratarlo para el próximo sábado que será 11 de mayo.
Que la tierra siga girando con besos y versos.
Ángeles.


No hay comentarios:

Publicar un comentario