domingo, 22 de mayo de 2016

Nuestro Macondo, Sábado 21 de mayho de 2016




LAS CUATRO Y DIEZ de Luis Eduardo Aute.

Fue en ese cine, ¿te acuerdas?, 
en una mañana al este de Edén, 
James Dean tiraba piedras 
a una casa blanca, entonces te besé. 
Aquélla fue la primera vez, 
tus labios parecían de papel, 
y a la salida en la puerta 
nos pidió un triste inspector nuestros carnets. 
Luego volví a la academia 
para no faltar a clase de francés, 
tú me esperaste hora y media 
en esta misma mesa, yo me retrasé. 

¿Quieres helado de fresa 
o prefieres que te pida ya el café?. 
Cuéntame como te encuentras, 
aunque sé que me responderás: muy bien. 
Ten, esta foto es muy fea, 
el más pequeño acababa de nacer. 
Oiga, me trae la cuenta, 
calla, que fui yo quien te invitó a comer. 
No te demores, no sea 
que no llegues a la hora al almacén; 
llámame el día que puedas, 
date prisa que ya son las cuatro y diez.

Buenas y soleadas tardes mis queridos Diversos. Ayer la mesa del fondo del café de Macondo y el espíritu de Gabriel García Márquez, que  nos observa entre mariposas amarillas, fueron testigos de canciones, versos, brillos, risas, conversaciones y cafés.
Comenzamos con los versos de Carlos Lesta: Brillo, Llueve otra vez, ..... universo sin afuera.... la pura plenitud de nuestros sueños. Escuchamos estos versos con distintos tonos y acentos, e imaginamos la lluvia dando brillo al paisaje. 

Brillo

Llueve otra vez
como llovía aquella  tarde
como llovía en aquel amanecer

nos enredabamos
y éramos uno en la tibieza
de nuestro universo sin afuera

Llovía lentamente y nos reímos
el mundo aparecía brillante
como nuevo

como si hubiera nacido
para celebrar con nosotros
la pura plenitud de nuestros sueños.
En A Coruña  2016 05 20

En el medio de las distintas versiones de Brillo también escuchamos las canciones sin música de Luis Eduardo Aute. Anda: Dejamos los datos....seamos un cuerpo enamorado, 

Anda 
quítate el vestido, las flores y las trampas 
ponte la desnuda violencia que recatas 
y ven a mis brazos 
dejemos los datos 
seamos un cuerpo enamorado 

Anda 
deja que descubra los montes de tu mapa 
la concupiscencia secreta de tu alma 
y ven a mis brazos 
dejemos los datos 
seamos un cuerpo enamorado 

Anda 
pídeme que viole las leyes que te encarnan 
que no quede intacto ni un poro en la batalla 
y ven a mis brazos 
dejemos los datos 
seamos un cuerpo enamorado 

Anda 
dime lo que sientes 
no temas si me mata 
que yo solo entiendo tus labios como espadas 
y ven a mis brazos 
dejemos los datos 
seamos un cuerpo enamorado

A por el mar: el mar que fue una palabra vacía y sin horizonte, Al alba: si te dijera amor mío que temo a la madrugada y Aleluya (en una lectura emotiva y compartida): un suspiro muy cercano, gritos mudos que suplican.....un mañana siempre incierto, unos labios temblorosos.

Aleluya
Si aún surge del desaliento 
el aire de una canción, 
si todavía algún príncipe duda 
entro el trono del rey o la ley del talión, 
si aún arde el último clavo 
que despidió el hormigón, 
si todavía hay alguna bandera 
que tenga por patria ninguna nación... 
ay, amor, es porque existes, 
aleluya, aleluya 
Si aún tienen rabo las nubes 
que duermen en el desván, 
si todavía hay quien sepa que "escrúpulo' 
no es un parásito del alacrán, 
si aún son los besos de Circe 
la causa del talismán, 
si todavía es el fruto del árbol 
del bien y del mal un atávico imán 
ay, amor, es porque existes, 
aleluya, aleluya 
Si aún se persiana un suicida 
antes del salto mortal, 
si todavía la carne de la soledad 
se perfuma con llores del mal, 
si aún no ha domado la Bestia 
el alma del animal, 
si todavía aletea algún pájaro dulce 
entre tantas estatuas de sal 
ay, amor, es porque existes, 
aleluya, aleluya 
Si aún no soporta el vampiro 
no verse en su identidad. 
si todavía hay quien tenga el honor 
de ser cómplice del crimen de la verdad, 
si aún no han aislado el genoma 
del clon de la Trinidad, 
si todavía es un vals lo que bailan, 
ingrávidas, las fuerzas de gravedad 
ay, amor, es porque existes, 
aleluya, aleluya.


Los versos se escuchaban y la música sonaba en nuestras cabezas. Canciones y poemas entrelazados con recuerdos. 
Mercedes compartió con nosotros versos de su taller de escritura, un escrito titulado: Con A: mi mamá me amaba y mi papá también, amigos amorosos...escondían palabras asombrosas. Recuerdos entrelazados con tiernas palabras. Al hilo de estos versos leí mi poema: Soy la letra A: La a de abrazar amigos..... y también la a de amilanarse ante los problemas. Ejercicios que hacen salir poemas diferentes, sorprendentes. Mercedes también escribió un poema Sin E: quizás quizás mañana...nombrará ancianas palabras. Y otros escritos pendientes de pulimento con o sin ajax. 
Rosalía nos leyó Trabajando, una conversación entre una octavilla y una octava real: cuando las musas están vageando...... la octava no es versátil es como un mástil....liar sin pasajes. Y nos comentó su encantamiento con la rima, de la cual tiene que huir a veces.....
Sergio y Rosalía nos comentaron la magnífica experiencia que tuvieron el Día de las Letras Gallegas en el Ayuntamiento, donde leyeron junto con Carmen poemas de Manuel María. Enhorabuena!!!!!!
Recordad la presentación del libro de Francisco Vila, que tendrá lugar en la librería Lume el jueves 26 de mayo a las 20:00. Será un buen momento para escuchar versos y compartir emociones, seguro que será una grata experiencia. Nos vemos allí. 
Y nos despedimos para volvernos a encontrar con los versos de Gabriel Ferrater el sábado 28 de mayo. 
Besos y versos envueltos en rayos de sol.

sábado, 21 de mayo de 2016

Nuestro Macondo 15 de Mayo de 2016- O noso Macondo, 15 de maio de 2016

A PONTE DAS LETRAS



Ía chuvia no 106 da rúa do Santo André na Coruña a mañá do sábado das letras (galegas). 

Nesta choiva de maio florecen polo Macondo varios Diversos con libros de letras galegas. Poucos. Poetas de ponte. A ponte das Letras. Semella que os poetas tamén collen ponte. Tamén baixas médicas. Pero a poesía todo o cura. Intres para-sé desfogar da vida. Poetas que camiñan por Oleiros. Disque en Maianca hai unha igrexa prerrománica. 

Bó sitio entón para pregarias en tempos de árabes reconquistas. Discusións e comparacións sobre a xá manida dicotomía home / muller sempre presentes nas reunión diversas.

 Falamos de Manuel María e da súa condición rural. Pensamento da terra dende a terra. Manuel María como un anaco de terra. Limos “O lume” e “O cuco” diste autor. 
O cuco

O cuco, cuco, cuqueiro
o cuco, cuco, cucón.
Madrugón e cantareiro
cantareiro e madrugón.

Oise pola carballeira
ó vello cuco souril
ó nacer a primaveira
antre o Marzo i o Abril.

O cuco, cuco, cuqueiro
o cuco, cuco, cucón.
Madrugón e cantareiro
cantareiro e madrugón.

¡O vello cuco cucou
e moito máis cucará!
¡O cuco non me capou
e nunca me capará!

O cuco, cuco, cuqueiro
o cuco, cuco, cucón.
Madrugón e cantareiro
cantareiro e madrugón.

Polas mañás ben cediño
o cuco canta: cu- cu.
¡Como o teño por veciño
eu trato o cuco de tu!

Outros diversos mais urbáns leron outros autores Galegos en traducción ó español.

Diversos. Terapia psicolóxica tamén. A poesía é para seren escoitados, pero tamén pa escoitar.

Letras galegas.

Sentimientos diversos.

Culturas diversas.


Miguel Melero. 15 de maio de 2016.


lunes, 9 de mayo de 2016

Nuestro Macondo, sábado 7 de mayo de 2016



CALENDARIO DE SÍSIFO (Juan Carlos Mestre).
Febrero
Chico quita chica a chico
Marzo
Chico busca otra chica
Abril
Chica quita chico a chica
Mayo
Chica busca otro chico
Junio
Chico quita chico a chica
Julio
Chica quita chica a chico
Agosto
Chica busca otra chica
Septiembre
Chico busca otro chico
Octubre
Chico
Noviembre
Chica
Diciembre
Nace el niño Jesús
Enero
Llegan los Reyes Magos


Muy buenas noches queridos Diversos. Llegó el sábado,  y los versos y las ideas fluyeron en la mesa del fondo del café de Macondo. Comenzamos la mañana hablando de atreverse, de ser valientes, de tratar de no arrepentirse de las cosas dejadas de hacer, de hacer, y si es necesario arrepentirse de hacer. 
Comenzamos con los versos de Leopoldo María Panero, Mercedes trajo el libro: Narciso en el acorde último de las flautas, y  nos leyó varios poemas de este hombre atormentado que se sentía como un agujero muerto, nos comentó que usaba el lenguaje del cuerpo. Leyó Ma Mere: Yo contemplaba caído mi cerebro, despojos de mi alma aún calientes..... esquina desolada de ciudad invernal.... puerta del infierno.... Y mi madre rió.


MA MERE
A mi desoladora madre, con esa extraña mezcla de compasión y náusea que puede sólo experimentar quien conoce la causa, banal y sórdida, quizá, de tanto, tanto desastre.
Yo contemplaba, caído……………………………..mi cerebro aplastado, …………….pasto de serpientes, (…) yo contemplaba mi cerebro para siempre aplastado y mi madre reía, mi madre reía viéndome hurgar con miedo en los despojos de mi alma aún calientes………………………………..temblando siempre como quien tiene miedo de saber que está muerto, y llora, implora caridad a los vivos para que no le escupan encima la palabra muerto. Vi digo mi cerebro en el suelo licuándose, como un excremento para las moscas. Y mi espíritu convertido en teatro vacío, del que todo pensamiento ha desertado
(…) mi espíritu como un teatro vacío donde en vano alentaba inútil, mi conciencia,……………………………………………………………cosa oscura o aliento de monstruo presentido en la caverna. Y allí, en el teatro……………vacío, o bajo la carpa del circo abandonado, tres atletas —Mozo, Bozo, Lozo—……………………………saltaban sin descanso, moviendo con vanidad desesperada el trapecio de un lado a otro, de un lado a otro. Y también, cortesanas
con el pelo teñido de un oro repugnante, intercambiaban leyendas sobre lo que nunca hubo en el palacio en ruinas. Y me vi luego, más tarde mucho más allá del demasiado tarde,…………………………………………………en una esquina desolada de alguna ciudad invernal, mendigando a los transeúntes una palabra que dijera algo de mí, un nombre con que vestirme. (…) Como una muñeca me mimo a mí mismo y finjo delante de nadie que aún existo. Peonza en la mano del dios de los muertos. Como una muñeca………………..extraviada en la ruta implacable de tantas otras, de las incontables………………..marionetas que ejecutan su vida como un rito funerario, una obsesión senil o un delirio último de moribundo. Porque los hombres no hablan, me dije,……………………..dije a los ciegos que manchaban de heces y sangre sus zapatos al pisar mi cerebro.……………………..Y al momento de pensar eso, un niño orinó sobre la masa derretida,………………………………………..dando luego de beber vino rojo y fuerte a un sapo para que borracho riera, riera, mientras caía sobre el invierno de la vida la lluvia más dura. Y al verlo, y mientras me arrastraba cojeando entre los muertos, pensé: llueve, llueve siempre en las ruinas. Y mi madre rió, al oír aquel ruido que delataba mi pensamiento.
Leopoldo María Panero: Narciso en el acorde último de las flautas (1979), Poesía 1970-1985. Madrid: Visor, pp. 131-133.
 Después escuchamos Linterna China: En la pared sombras de sapos van.....mi destino sigue en pie y mi madre muere en mi. 

LINTERNA CHINA
El agujero que ha muerto se
despliega como una sábana para
no poder dormir -yo, al fondo
de él, habiéndome olvidado-
mi cadáver
será un signo -En la pared sombras
de sapos van, una a una, pasando
pensando -no poder dejar de pensar
-en la pared desfilan
lentas las sombras de los sapos
de mi pensamiento-
no estoy sino aquí.
Atravesar el bosque para
saber que está vacío, y por siempre.
Un coro
de gigantescos monos danzará sobre
mi cadáver y uno de ellos, el que
lleva la insignia del jefe, cogerá
en su mano mi pequeño cráneo y reirá, reirá.
Mas mi destino sigue
erguido en pie en un mundo
desierto. Esposa
de un esqueleto, fiel a un muerto, así
eres tú, Helaí.
Y mi madre muere en mi pensamiento.

Seguimos con el poema titulado: La alucinación de una mano, o la esperanza póstuma y absurda en la caridad de la noche, que comienza diciendo: Una mujer se acercó a mi y en sus ojos ví todos mis amores derruidos. Y por último leímos El último espejo en donde Panero dice: Todo aquel que atraviesa el corredor del Miedo llega fatalmente al Último Espejo, reflexión que nos acercó a Cesare Pavese diciendo: vendrá la muerte y tendrá tus ojos.

El último espejo
 Inspirado en una pesadilla que tuvo por nombre 
                                                                          «Marava Domínguez Torán»
Todo aquel que atraviesa el corredor del Miedo 
llega fatalmente al Último Espejo 
donde una mujer abrazada a tu esqueleto nos muestra 
cara a cara el infierno de los ojos sellados 
de los ojos cerrados para siempre como en una máscara 
de muerta representando en el más allá el teatro último: 
así miré yo a los ojos que borraron mi alma 
así he mirado yo un día que no existe en 
el Último Espejo

 Escuchamos las lúcidas palabras de un loco, y descubrimos muchas certezas y luces infinitas. 
También nos acercamos a Juan Carlos Mestre, y leímos Carpe Diem: Llaman por teléfono, otra vez la noche se ha equivocado de número

CARPE DIEM


Cuando el amor se termina no queda nadie que traiga flores los sábados
Las botellas de Lambrusco dejan de hacer ¡plop!
Las deliciosas películas de arte y ensayo se vuelven aburridas
Nadie te regala calcetines por Pascua, nadie te pone el termómetro
Cuando un amor se termina dan las diez un cuarto de hora antes
Las estrellas comienzan a acumular un retraso considerable
Las gatas dejan plantado al párroco en los tejados
Las luces indirectas enfocan directamente los portarretratos
Cambias los muebles de sitio, ordenas la biblioteca
Aparece la lupa, encuentras los comprobantes de la tintorería
Las cajeras del supermercado te empiezan a sonreír de otra manera
Los cuervos marinos se vuelven palomas mensajeras
Se acabó el azúcar, echas mano del edulcorante
Te paran todos los taxis, vas derecho al motel de las metáforas
Tocan e1 timbre, el cartero te deja un certificado para la vecina
Llaman por teléfono, otra vez la noche se ha equivocado de número.


Y leímos la Citroneta azul: En una citroneta azul, haciendo sonar el claxon de la luna, voy de regreso al pueblo donde mis amigos,salen cada noche a esperar los ovnis

LA CITRONETA AZUL
En una citroneta azul
haciendo sonar el claxon de la luna
voy de regreso al pueblo donde mis amigos
salen cada noche a esperar los ovnis.
Sueñan en el cielo las estrellas
y las fugaces sombras de las niñas muertas
elevan en los prados sus cometas
con recados para los platillos voladores.
Todo esto se podría decir de otra manera
si allá tras las cortinas del espacio
existiera el silabario, el colibrí, la esfera
del vagabundo aerolito de los pájaros.
Yo no espero otra luz que la tristeza
de quien regresa a una escuela abandonada
donde aletean todavía en la pizarra
las mariposas blancas de la melancolía.


Encontramos unos versos frescos, cercanos, sencillos en estos poemas de Mestre. 
Y en relación a estos versos surgen otros versos, Paco nos leyó su poema titulado: Me llamaron: me llamaron loco porque hablaba conmigo mismo.....me llamaron cruel porque me olvidé de decirle adios a un muerto. También nos leyó Ahí vienes: ahí vienes en el aire que respiro.... como una flecha dispuesta a morir matando...ahí vienes como sombra de los sueños a mi cama. Y nos leyó unos versos de su Trilogía: Si mirándote a los ojos tus lágrimas se convirtieran en lluvia, me ahogaría en tus lágrimas. Comentamos la importancia del agua en sus poemas y en la presencia del mar en su vida, el mar, siempre necesario y siempre presente. Hablamos del proceso creador del poeta y del momento especial que es la transición entre el sueño y la vigilia, momento mágico para soñar y crear. Y Rosalía nos leyó su poema dedicado a Mestre: poeta anacoreta, difícil ser anacoreta. Y finalizo la mañana poética con una conversación madre-hija entre Rosalía y su madre titulada Poema del conejo, en el cual se atraviesan ideas, recetas, cariños, palabras y olvidos; Yo cocino y tú repartes, recetas ¿de majaretas? con palabras hago guisos.
Y nos despedimos para reencontrarnos el próximo sábado 14 de mayo con los versos de Manuel María.
Que las horas y los días se invadan de besos y versos.

lunes, 2 de mayo de 2016

Nuestro Macondo, Sábado 30 de Abriol de 2016




EL NIÑO Y LA MARIPOSA

Mariposa,
Vagarosa
Rica en tinte y en donaire
¿qué haces tú de rosa en rosa?
¿de qué vives en el aire?
Yo, de flores
Y de olores,
Y de espumas de la fuente,
Y del sol resplandeciente
Que me viste de colores
¿Me regalas
tus dos alas?
¡son tan lindas! ¡te las pido!
deja que orne mi vestido
con la pompa de tus galas
Tú, niñito
tan bonito,
tú que tienes tanto traje,
¿Por qué quieres un ropaje
que me ha dado Dios bendito?
¿De qué alitas
necesitas
si no vuelas cual yo vuelo?
¿qué me resta bajo el cielo
si mi todo me lo quitas?
Días sin cuento
De contento
El Señor a ti me envía;
Mas mi vida es un solo día,
No me lo hagas de tormento
¿te divierte
dar la muerte
a una pobre mariposa?
¡ay¡ quizás sobre una rosa
Me hallarás muy pronto inerte.
Oyó el niño
Con cariño
Esta queja de amargura,
Y una gota de miel pura
Le ofreció con dulce guiño
Ella, ansiosa,
Vuela y posa
En su palma sonrosada,
Y allí mismo, ya saciada,
Y de gozo temblorosa,
Expiró la mariposa

Rafael Pombo
Muy buenos y luminosos días mis queridos Diversos. Ayer en nuestra mesa del fondo del café de Macondo habitaron citas y fábulas de tierras colombianas. Como habíamos quedado leímos poemas del autor colombiano Rafael Pombo, Vivi nos explicó que este autor se trabaja en las escuelas de Colombia, nos habló de retazos de su vida, de sus viajes, de su romanticismo. Leímos La pobre viejecita, y descubrimos la ironía y la melodía de estos versos en los cuales la viejecita tenía de todo pero era una pobre viejecita, que tenía un año más de vieja y uno menos que vivir y además padecía de mal de arrugas. También escuchamos Rin rin renacuajo, en cuyos versos se enseñaba en las escuelas la obediencia a la madre.

El renacuajo paseador 
El hijo de Rana, Rinrín Renacuajo, 
Salió esta mañana muy tieso y muy majo Con pantalón corto, corbata a la moda, 
Sombrero encintado y chupa de boda. 
“¡Muchacho, no salgas!” le grita mamá, 
Pero él le hace un gesto y orondo se va. Halló en el camino a un ratón vecino, 
Y le dijo: “¡Amigo! venga usted conmigo, 
“Visitemos juntos a doña Ratona “Y habrá francachela y habrá comilona”. 
A poco llegaron y avanza Ratón, 
Estírase el cuello, coge el aldabón, 
Da dos o tres golpes, preguntan: ¿Quién es?” 
“-Yo, doña Ratona, beso a usted los pies”. 
“¿Está usted en casa?” -”Sí, señor, sí estoy; 
“Y celebro mucho ver a ustedes hoy; 
“Estaba en mi oficio, hilando algodón, 
“Pero eso no importa; bien venidos son”. 
Se hicieron la venia, se dieron la mano, 
Y dice Ratico, que es más veterano:
 “Mi amigo el de verde rabia de calor, 
“Démele cerveza, hágame el favor”.
 Y en tanto que el pillo consume la jarra 
Mandó la señora traer la guitarra 
Y a Renacuajito le pide que cante 
Versitos alegres, tonada elegante. 
“-¡Ay! de mil amores la hiciera, señora, 
“Pero es imposible darle gusto ahora, 
“Que tengo el gaznate más seco que estopa 
“Y me aprieta mucho esta nueva ropa”. 
“-Lo siento infinito, responde tía Rata, 
“Aflójese un poco chaleco y corbata, 
“Y yo mientras tanto les voy cantar 
“Una cancioncita muy particular”. 
Mas estando en esta brillante función 
De baile y cerveza, guitarra y canción, 
La Gata y sus Gatos salvan el umbral, 
Y vuélvese aquello el juicio final. 
Doña Gata vieja trinchó por la oreja 
Al niño Ratico maullándole: “¡Hola!” 
Y los niños Gatos a la vieja Rata 
Uno por la pata y otro por la cola. 
Don Renacuajito mirando este asalto 
Tomó su sombrero, dio un tremendo salto, 
Y abriendo la puerta con mano y narices, 
Se fue dando a todos “noches muy felices”. 
Y siguió saltando tan alto y aprisa, 
Que perdió el sombrero, rasgó la camisa, 
Se coló en la boca de un pato tragón 
Y éste se lo embucha de un solo estirón. 
Y así concluyeron, uno, dos, y tres, 
Ratón y Ratona, y el Rana después; 
Los Gatos comieron y el Pato cenó, 
¡Y mamá Ranita solita quedó! 
 Y leímos un poema titulado Al amor, que Rafael Pombo publicó con un pseudónimo, Edda, y que dice: Era mi corazón la estéril nada, fue tu sombra el amor que me ilumina. Y Rosalía leyó El niño y la mariposa, poema de sensibilidad exquisita y al cual Rosalía respondió con un salmo de su propia autoría. Después Paco nos leyó su fábula La hormiga y el elefante: Volver atrás no podía,.......avanzar soñando. Y Elizabeth nos leyó un Romance escrito por García LorcaDon Boyso que, al ser proveniente de la tradición oral posee variaciones varias.

Romance de don Boyso
Camina don Boyso
mañanita fría
a tierra de moros
a buscar amiga.
Hallóla lavando
en la fuente fría:
—¿Qué haces ahí, mora,
hija de judía?
Deja mi caballo
beber agua fría.
—Reviente el caballo
y quien lo traía,
que yo no soy mora
ni hija de judía.
Soy una cristiana
que aquí estoy cautiva.
—Si fueras cristiana
yo te llevaría,
en paños de seda
yo te envolvería;
pero si eres mora,
yo te dejaría.

Montóla a caballo
por ver que decía;
en las siete leguas
no hablará la niña.
Al pasar un campo
de verdes olivas
por aquellos prados
qué llantos hacía.
—¡Ay prados! ¡Ay prados!
prados de mi vida.
Cuando el rey mi padre
plantó aquí esta oliva,
él se la plantara,
yo se la tenía,
la reina mi madre
la seda torcía,
mi hermano don Boyso
los toros corría.
—¿Y cómo te llamas?
—Yo soy Rosalinda,
que así me pusieron
porque al ser nacida
una linda rosa
n´el pecho tenía.
—Pués tú, por las señas
mi hermana serías.
Ábra la mi madre
puertas de alegría,
por traerla nuera
le traigo a su hija.


Y tenemos varias citas. 
El 6 de Mayo a las 20:30, Carmen Torreiro inaugura su exposición titulada: Deusas celtas da auga, espíritus y metamorfoses, será en A fábrica do Trece, calle Antón Vilar Ponte, antes División Azul, nº 13, habrá actos varios y estamos invitados todos nosotros a la lectura de versos que podrían tener el hilo conductor de los poemas de Manuel María, autor al que está dedicado este año el Día de las Letras Gallegas, animémonos, será un momento mágico. 
Y adelantar que el 26 de Mayo en la librería Lume, a las 20:00,  Francisco Vila presenta su libro, En las laderas del infinito: 19 poemas de amor y una historia imaginaria, otro momento mágico para compartir. 
Y quedamos emplazados en el mismo lugar y a la misma hora el sábado 7 de Mayo para tratar los poemas de Juan Carlos Mestre, y todos aquellos que quieran acudir.
Que esta primera semana de mayo traiga besos y versos a nuestros días.