viernes, 25 de noviembre de 2016

Marcos Ana - MI casa y mi corazón



MI CASA Y MI CORAZÓN
(Sueño de libertad)

Si salgo un día a la vida
mi casa no tendrá llaves:
siempre abierta, como el mar,
el sol y el aire.

Que entren la noche y el día,
y la lluvia azul, la tarde,
el rojo pan de la aurora;
la luna, mi dulce amante.

Que la amistad no detenga
sus pasos en mis umbrales,
ni la golondrina el vuelo,
ni el amor sus labios. Nadie.

Mi casa y mi corazón
nunca cerrados: que pasen
los pájaros, los amigos,
el sol y el aire.


Nuestro Macondo, 19 de noviembre de 2016




SUZANNE DE LEONARD COHEN

Suzanne te hace bajar a su refugio junto al río
Puedes oír como pasan los barcos
Puedes pasar la noche junto a ella
Y sabes que está medio loca
Pero por eso quieres estar allí
Te ofrece té y naranjas
Que vienen desde China
Y justo cuando vas a decirle
Que no tienes amor para darle
Te coge y mece en sus brazos
Dejando que sea el río que conteste
Que siempre has sido su amante.

Y quieres viajar con ella,
Quieres viajar a ciegas,
Y sabes que confiará en ti
Porque has tocado su cuerpo perfecto con tu mente.

Y Jesús era un marinero
Cuando caminaba sobre las aguas
Y pasó mucho tiempo observando
Desde su solitaria torre de madera
Y cuando supo con certeza
Que solo los ahogados podían verle
Dijo: "Todos los hombres serán marineros
Hasta que el mar los libere"
Pero él mismo estaba roto
Mucho antes de que el cielo se abriera
Abandonado, casi humano
Se hundió bajo tu sabiduria como una piedra.

Y quieres viajar con él
Y quieres viajar a ciegas
Y sabes que deberías confiar en él
Porque él ha tocado su cuerpo perfecto con su mente.

Ahora Suzanne coge tu mano
Y te conduce hacia el río
Lleva pieles y harapos
Sacados de la ventanilla del Ejército de Salvación
Y el sol cae como la miel
Sobre nuestra dama de la bahía

Y te muestra dónde has de mirar
Entre la basura y las flores
Hay héroes entre las algas
Hay niños en la mañana
Que se inclinan hacia el amor
Y lo harán así para siempre
Mientras Suzanne sostenga el espejo.

Y quieres viajar con ella
Y quieres viajar a ciegas
Y sabes que puedes confiar en ella
Porque ella ha tocado tu cuerpo perfecto con su mente.

Muy buenas noches Diversos, dicen que la muerte es el olvido, y ayer en la mesa del fondo del café de Macondo, unos cuantos de nosotros nos dedicamos a vencer la muerte con las únicas armas de los recuerdos. Leonard Cohen se fue hace poco y hace ya unos años Rafael Alonso, que hizo el curso inicial con nosotros, también se fue. Y recordarlos y nombrarlos y leer sus versos es nuestra manera de luchar contra la tan democrática muerte.
Comenzamos con los versos de Cohen que acudieron en dos libros titulados. Flores para Hitler y Parásitos de paraíso. Leímos de este gran señor, ¿Qué hago aquí?: No sé si el mundo ha conspirado contra el amor, yo he conspirado contra el amor....Me niego que se me sujete como a un borracho.... Yo espero a que cada uno de vosotros confiese, Y también leímos El gran mundo: Y tu curiosa vida conmigo será relatada tan a  menudo que nadie creerá que envejeciste. Algunos opinan que Cohen les gusta más como cantante que como poeta, pero su calidad artística es indiscutible. 
Y también recordamos a Rafa, el impulsor de nuestro nombre como grupo, leyendo El amor roto en mil pedazos: Este espejo hecho de otros espejos. Rafa gustaba de inventar palabras y en este poema que aparece en nuestro libro conjunto Ciclo de plenilunios descubre la palabra sexsuave: lo sexsuave de cada noche vivida luminosa en pequeñas muertes... 
Carmen nos interpretó el poema de Lorca Prendimiento y muerte de Antoñito el Camborio: Moreno de verde luna, anda despacio y garboso, a la mitad del camino, cortó limones redondos. Lo escuchamos con ávida emoción y nos cuenta el porque de traerlo en este momento, en el que los procesos de la muerte se amplian desde las bombas hasta los cortes de luz. Actualidad desde el pasado. Preciosa y emocionante interpretación de Carmen.
Sara hace un tiempo escribió unos cuadros y ahora los pintará. Pero mientras tanto nos leyó El Árbol del amor, relato que describe esos cuadros y te los hace ver a través de sus palabras: Olor a tierra quemada... colores ocres y rojos en sus tejados.... las nubes anunciaban un inminente grito. 
Rosalía Rodríguez nos leyó unos versos suyos, que nos sonaron a un sueño: Las burbujas me nombraron reina de un paraíso indescriptible, ...aquí abajo no se oye nada,..el agua está viva, me enlaza.
Y a Rosalía Ajamil recogió el reto de un amigo de hacer un poema con tacos y escribió Una ordinariez, el cual leyó macanudamente entre disparos e insultos. Magnífico y muy original.
Como mañana de sábado que se precie, los poemas poblaron este pequeño rincón del mundo y nos hicieron saber que estamos vivos y que recordamos.
El próximo sábado llamamos a nuestra hermana la tierra asturiana en los versos de Ángel González, quedando pendiente Francisca Aguirre para el sábado siguiente.
Que los días se llenen de besos y versos.



Nuestro Macondo, sábado 12 de noviembre de 2016


Muy buenos días mis queridos Diversos. Hoy empezamos con un cuadro que aparece en nuestro rincón de poetas y que nos sabemos desde cuando está ahí acompañándonos. Ayer vino su autora, Ángela, y lo descubrió y nos llevamos una gran alegría. La acuarela la pintó Ángela y se la regaló al Macondo cuando celebramos su 20º aniversario, y Ángel la enmarcó y la colgó. Gracias.
Y comenzó la mañana con gotas de lluvia y versos, Rosalía Rodríguez nos leyó poemas propios: Y yo alejándome y tú tan cerca,..... No entres más allí, había curvas de colores persiguiéndote,.... Mi ritmo es una piel extraña, vamos evaporándonos, lo sé........ Sus rubias trenzas salpicadas de naranja, ojos parpadeantes cuelgan de las ramas de los árboles. Sus versos nos producen sentimientos e imágenes, que a veces parecería necesario que acompañaran algunos de sus versos.
Y sigue la mañana con Rosalías, Rosalía Arjamil, disparando versos, nos acaompaña con: Despierta la mañana con la voz quebrada, bajo el amparo de la virgen del sitio....., y nos contó ¿Una historia de amor? : En la poesía de la barra de un bar, entre el túnel de un gin tónic.... fluye el pus en sus heridas, vierte lágrimas de tintas negras. Nos gustó la historia de amor aunque tuviese interrogantes y nos gustó escucharla en su voz. Cualquiera puede leer poesía pero somos privilegiados escuchando versos, y más si son de sus propios autores. Genial!

Después escuchamos los versos de Paco Vila.Nos leyó magníficamente Hoy he visto un gorrión muerto: Que amargura no verlo volar, fue la última criatura viva sobre la tierra, cayó muerto de vida. Y también nos leyó: ¿Por qué me dijiste que la lluvia se avecina?. Disfrutamos de unos buenos versos en una buena lectura, aprendimos cuando hay que aspirar y tratar los silencios. Aprender.

A continuación Yolanda nos trajo versos de su poema, Mi pie izquierdo: Fue como un suspiro , con mi cuerpo quemado,... fue el ritmo de mi pie valiente,.. de mis brazos que te abrazan sin tocarte,... soy el pincel de tu respiración. Nos contó que están inspirados en la magnífica película del mismo título. Y también trajo una antología de poetas mujeres de la generación del 27, titulada Peces en la Tierra, que la historia hizo que fuesen olvidadas y que necesitan y deben ser recordadas. Leyó un poema de Margarita Ferreras titulado Pez en la tierra: Loca de cabelleras vegetales, y sube su ansiedad por espirales de árboles,.... danzan los esqueletos de rosas. Y también leyó un poema de Lucía Sánchez Arjomil, La danza de Pierrot: En un claro del jardín,... la faz pálida de harina,..... Pierrot danza mudo y grave. A veces la historia borra las huellas de personas interesantes y es importante recordalas y disfrutar de sus palabras.
Mercedes nos trajo los versos de Jim Morrison en los cuales vimos su estilo simbolista: El hermoso monstruo vomita un chorro de relojes despertadores joyas cuchillos monedas de plata y sangre de cobre............ Y también leyó La chica de la tienda a medianoche se descalza..... los jinetes se levantaron.
Y finalizamos la mañana con un poema de Ángel González, Ayer,

Ayer (por Ángel González)

Ayer fue miércoles toda la mañana.
Por la tarde cambió:
se puso casi lunes,
la tristeza invadió los corazones
y hubo un claro
movimiento de pánico hacia los
tranvías
que llevan los bañistas hasta el río.

A eso de las siete cruzó el cielo
una lenta avioneta, y ni los niños
la miraron.
Se desató
el frío,
alguien salió a la calle con sombrero,
ayer, y todo el día
fue igual,
ya veis,
qué divertido,
ayer y siempre ayer y así hasta ahora,
continuamente andando por las calles
gente desconocida,
o bien dentro de casa merendando
pan y café con leche, ¡qué
alegría!
La noche vino pronto y se encendieron
amarillos y cálidos faroles,
y nadie pudo
impedir que al final amaneciese
el día de hoy,
tan parecido
pero
¡tan diferente en luces y en aroma!

Por eso mismo,
porque es como os digo,
dejadme que os hable
de ayer, una vez más
de ayer: el día
incomparable que ya nadie nunca
volverá a ver jamás sobre la tierra.


en el que,  como llama la atención García Montero en una antología del poeta, el poeta tiene la capacidad e alterar el uso de los horarios y del tiempo por una lógica interna distinta a las normas. Disfrutemos de las alteraciones. 


domingo, 6 de noviembre de 2016

Nuestro Macondo, sábado 5 de Noviembre de 2016



MARIA:
No supe decir las palabras exactas
que calmaran tu mente
que hicieran asomar tu sonrisa
aquella que reflejaba tu mirada.
{Mente}
No conseguí hacerte olvidar
por unos instantes que el dolor existe,
que el tiempo no se detiene por nada
que inevitablemente avanza.
Y ya no estás.
{Ausencia}
Y en un último suspiro
susurraste mi nombre,
el eco de aquellas palabras
aún me acompaña.
Y ya no estás.
{Realidad}
Aprendí una valiosa lección
la vida es un instante efímero
pero los recuerdos
que viven en nuestra mente
nos hacen inmortales.
{Inolvidable}
Y sigues ahí,
y el eco de aquellas palabras
me persigue,
para siempre.
{Alma}
Ana Vidal Lacorte.




Muy buenos días mis queridos Diversos. Ayer como sábado que se precie la mesa del fondo del café de Macondo se llenó de versos y besos, y de nuevas compañías, nos vinieron a visitar, esperamos que para quedarse Ana y Yolanda, y compartieron con nosostros poesías y café. Bienvenidas, nuestro grupo pretende ser una casa con las puertas abiertas.


Y nuestra tarea para este sábado era tratar poemas de poetas jóvenes, de los cuales Mercedes trajo una antología, y descubrimos con gran alegría y doble lectura el poema de Fernando Valverde titulado Celia, que nos llenó de preciosas imágenes y que traigo aquí



Celia de Fernando Valverde
No conoces la lluvia ni los árboles,
pero ya eres un bosque.
Hoy que comienza el mundo para ti,
que se pueblan tus ojos con el mar,
que todos te reciben como en una estación
donde se espera siempre,
que es principio y asombro,
mapas que no aseguran un lugar donde ir.
Hoy que el mundo comienza,
tristeza inadvertida,
eres el tiempo limpio,
el olor a madera y el silencio,
las preguntas sin sombras
y el amor sin orgullo
del que ha perdido todo.
Es esa mi certeza,
las olas, el océano,
tu risa que es un pájaro.
Has traído el murmullo de un recuerdo,
los pies pequeños, como pequeño
es el rastro de nieve que has dejado
en las horas de enero.
Cómo será la vida cuando crezca en tus manos
con la fragilidad de las buenas noticias,
como un pez que se escurre para volver al río.
Una tarde cualquiera,
con la misma sorpresa que un amor,
vas a sentir la brisa que ha tocado los árboles
con su cansancio antiguo.
Hay veces que es rugosa y escuece como un fósforo
cuando enciende un recuerdo…
Tus manos brillan,
no hay sombras ni puñales,
puedo ver los cometas
arañando la noche
como un barco que zarpa y se adentra en la niebla.
La vida es una casa donde habita un extraño,
un jardín del pasado al que no volverás,
una orilla que buscas con miedo a los fantasmas.
Pero también la vida
es una luz detrás de una ventana
cuando la oscuridad
ocupa cada hueco y cada continente.
Esta noche es oscura,
el tren busca unos brazos
que están al otro lado de las horas.
Mientras, pienso en el modo de decirte
que los sueños son parte de nosotros
como un embarcadero es un viaje.
Porque ya eres un bosque,
y hay delfines, y lagos, y montañas,
y amores imposibles
que se llamarán Celia.
Alguien dice tu nombre en el futuro
y se llena de gente una casa vacía,
todos se sientan a la mesa.
Ya lo habrás olvidado,
fue la felicidad quien sembró este dolor,
fue la felicidad igual que una tormenta
sobre un vaso vacío.
Cuando lleguen el miedo y la desesperanza,
y todas las cerezas hayan caído al barro,
y las gaviotas griten
el olvido imposible de una mujer herida
que siente que avanzar es quedarse más sola…
Si todo esto sucede
recuerda la manera en que la lluvia
se convierte en un árbol
y el modo en que las olas
son el final del agua y el principio del mar.
No conoces el mar, ni el barro, ni los árboles,
pero ya eres un bosque por el que pasa un río.



Y continuamos la mañana con los versos de Yolanda López, que nos leyó Unha habitación con vistas: Ainda as follas do outono, recanto dos versos do si e do non, a corazón aberto a túa imaxe. Y también compartió con nosotros su poema Una mujer tranquila que dice: Frenética. Rápida y constante..... Navego y callo para no decir tu nombre. Nos emocionaron sus palabras y los guiños con el mundo cinematográfico. Genial.


Después escuchamos Entre tú y tú y yo de Alica Rodríguez, en la voz de Carlos Lesta. Nos llevó a la postmodernidad y a los ánimos rotos. Entre tú y tú y yo no había abismo solo vasos comunicantes......


Y continuamos la mañana con un superventas de planeta, el cantautor Marwan con su libro Todos mis futuros son contigo, que vino de la mano de Rosalía y nos hizo un guiño de complicidad a todos los presentes. Escuchamos Tengo un amigo poeta: Está loco por juntar palabras......., y también ¿Dónde está África?: Está debajo de la palabra dignidad, queda debajo de la palabra escasez.... Y Carmen nos deleito con la lectura de Los jóvenes poetas: Los jóvenes poetas viven en los bares, escapando de los renglones torcidos de su juventud..... Un descubrimiento impactante y recomendable. Ahí está.....


Y como la mañana iba de jóvenes poetas yo traje un poema especialmente escrito para la ocasión por una joven exalumna mía. Ana Vidal Lacorte, se titula María e inicia este correo. Tiene una estructura muy original y una mística atractiva. Bien por Ana. Enhorabuena.


Y como la vida está también en los recuerdos, Vivi quiso recordar para que continuase viviendo a un autor colombiano de nombre Candelario Obeso y leyó: Nací humilde y soy fuerte, me apegué a la gloria, soy pobre y nada temo.......


Y pasó el tiempo, que inevitablemente pasa siempre, y como siempre quedamos citados para el sábado que viene con los versos y poetas que quieran acudir y manifestarse, todo ello unido a besos y cafés.


Nuestro Macondo, sábado 29 de octubre de 2016





Entre Eros y Thánatos, entre difuntos y santos, un hombre dijo esto de la muerte, su
nombre Rufino Felix Mourillon; Extremeño poeta de soledades, recuerdos y amor, bajo
el título de
Certeza

“Lo duro no es morir
se conoce ya el sueño
y su despojamiento de la vida
cuando impone la ausencia.

Lo peor es dejar
a cuantos amas
sabiendo ya que nunca
conocerás sus penas y alegrías.”

Y en su reseña, de alma extremeña, se refugia en soledad, en la lírica de las palabras, la
sed de su tierra, su admiración por algo que no se nos escapa, el valor de la sencillez
del líquido que en la vida nos acompaña, somos tierra, de muertos, pero en vida somos
sangre, somos alma, corazón y agua.

Y de su sed llegaron poetas diversos, Sara Blanco con su prosa versada, en su
Espiral deEstrellas, nos contó que hoy por el mar está envuelta, leyendo sus sentimientos
escritos en su cuaderno “camino que la noche tibia le ofrecía…” y en su Magia de vivir,
pintando con tizas y utilizando de pinceles las coletas de sus trenzas de niña, Sara nos
leyó de su libreta reflexiones muy bellas “ De la Magia de vivir cada día hacía que una
sonrisa asomara, más como lava de volcán callada..”

Y al oído del Infinito de la Espiral, Paco con su voz profunda, con su voz queda, éste
verso nos regaló:
“Hoy he visto el infinito
por si al regresar te pierdo,
escondida
en los confines del universo.”

Carmen seducida dejó su aportación, en un cuento, treinta y cuatro formas de explicar
el universo, y aquí el retrato del final de uno de ellos, como los versos, siempre
diversos: “Deus non se opuxo, pero ainda hoxe se pregunta quén demo sería o que lle
enviour a Caixa con chicarros”

Entre reflexiones, veladas alusiones al circo de hoy en el hemiciclo, efectuadas por un
Antonio Campo, hoy sembrado por segundas o retrancas, ironías antes decían, acabo
la sesión con la síntesis maravillosa de una descripción que efectuó Sara de sí misma
“Yo me considero Abstracta”

Sin dejar de destacar una sugerente propuesta “ re-generación” de Mercedes, quién a
todos nos emplazó, para buscar nuevos versos, de una nueva generación, nacida tras la
Constitución.
A todos, gracias por la benevolencia en mi exceso de verborrea, y mis disculpas por si
no he sido capaz de reflejar la belleza de una mañana, en la que fue investida una
dama, la palabra, nunca muerta y siempre santa, con el cariño y el recuerdo a un
Angel, que entre santos y difuntos esa mañana voló, y que con la lectura por Paco del
Poema del extremeño “las Aguas últimas”, concluyó.

Rosalía Ajamil