sábado, 30 de enero de 2021

Nuestro Macondo, Sábado 30 de Enero de 2021

 


Buenas y lluviosas tardes mis queridos Diversos, esperando nuestras próximas reuniones, que se hacen esperar, esta semana recibimos los libros de poesía de la suscripción a Espiral Maior, los versos siempre prevalecen.




Y con la suscripción también vienen los dos últimos versos del primer soneto que comenzó a enviar Miguel Anxo Fernán-Vello. 




Esto nos marca el tiempo. Ya llevamos siete años de suscripción.

Que la lluvia venga cargada de besos y versos.

Ángeles. 

sábado, 23 de enero de 2021

Nuestro Macondo, sábado 23 de Enero de 2021

 

Muy buenas tardes mis queridos Diversos, después de las fiestas y las nieves navideñas, volvemos a encontrarnos sin encontrarnos para defender la alegría (como decía Benedetti) y para defender la poesía, por supuesto, tan necesaria en estos tiempos convulsos. 

Comenzamos con los versos que nos llegan del sur, de ese Jerez de Miguel Ángel Cabezas que nos llena el alma de añoranzas de palabras compartidas. 

A pesar de todo seguiremos en contacto y volverán los sábados de la mesa del fondo del café de Macondo.

Hasta entonces cuídense 

Besos y versos. 

Ángeles.



CRÓNICA "DIVERSOS"

"DE NIEVES, FRÍOS Y OTRAS LINDECES".

El sur abre camino al 2021. A las reuniones no reuniones, casi clandestinas, que ni privadas nos valen.

Y desde este punto geográfico, ahora tan descafeinado de todo, solo queda un "fino" para entonar el cuerpo y de paso las teclas del ordenador, un tanto displicentes.

Y allá vamos, a este menester de la escritura de poemas de este fin de año pasado y principio de 2021.



"Hecho de nada, o algo,

o apenas nada.

Y sin embargo,

parece hecho de todo,

o casi todo.

Así es la vida"


- - . - - 


"Queman las palabras en las manos

y escapan entre los dedos,

para hacerse versos del poema.

Son como gotas de lluvia

que van mojando y mojando.

Son como arena fina de playa.

O como nubes.

Son los latidos de un corazón arrítmico,

como el mío.

El tiempo de los sueños.

La rebeldía.

El amor y el desamor.

El buenos días

y el chocolate con churros.

Y el mar abierto.

Todo un infinito de palabras."



- - . - - 



"Nace o renace la pluma inquieta

de pasado a futuro.

De lo que fue y adónde fue.

Y ahora, que ya casi es futturo,

lo que será.

y es en esta lucha en el tiempo,

en las mañanas que tornan a noches,

en los sueños que despiertan bruscamente,

donde se juega la vida."



- - . - - 



"Y llego a escribir,

a escribirte

como me gusta hacer,

con las yemas de mis dedos,

a escribir

en tu espalda desnuda,

a escribirte

caricias en tu piel.

Mi poema es tu beso."



- - . - - 



"El soñaba todas las noches.

Y en el día también cerraba los ojos

y abría el corazón.

No sabía ser de otra manera.

Su escritura era sencilla

y sus palabras claras.

Hacía versos de la vida.

Y a lo mejor, ella no sabía leer.

El siguió sus sueños

y no cerró el corazón."



- - . - - 



"Y dime por dónde sale el sol

si no es por tus ojos.

Así es mi sueño de todos los días,

porque mi sueño eres tú,

en el día y en la noche.

Que no controlo las horas

ni el paso del tiempo,

porque estás siempre en mí,

en mi infinito mar particular,

para ser la Polar del barco de mi vida."



- - . - - 



"Y así es como vine.

Y así me conociste.

Y así me voy.

Desnudo."



Y así, con media docena de últimos poemas y una coletilla poco apropiada al tiempo que tenemos os he llevado a la tierra jerezana que, por ahora, retiene mis días. Añoranzas?, seguro que sí.

Muchos versos y besos.

Miguel Angel.



domingo, 20 de diciembre de 2020

Nuestro Macondo, Sábado 19 de diciembre de 2020

Muy buenas tardes mis queridos Diversos. Llegando a las navidades de este 
atípico año, rematamos nuestro año poético con una guinda que 
es un pastel completo. Nuestra querida Rosalía nos escribe y
 describe con su bien hacer y con su chispa habitual, muchísimas gracias linda. 
Que estos días los besos y los versos acaricien nuestras almas
a la espera de tiempos mejores. Nos reencontramos pasadas las fiestas.
Ángeles 

Zona de los archivos adjuntos
 Buenos días Cronistas,



Hoy cerramos la edición, para darle al turrón, y algunos, con algo más de suerte, al polvorón, habrá quién incluso coma perdices, los más serán felices, y quizás todos tengamos esos momentos para echar de menos a los que lo celebran lejos; en otras tierras, cruzando el mar y los más, en el cielo, no me cabe duda de que a Sara le encantará leernos, estoy segura, de que allá dónde este, ha disfrutado de nuestros correos.

Me toca poner el punto y seguido, y sólo puedo decir gracias a todos los que estáis ahí, a esa Directora con mano de Ángel que ha sacado un periodista de cada uno de nosotros, y ha sabido elaborar una revista semanal, que nos ha hecho disfrutar, hasta atravesar hasta el final su hoja en blanco; subirnos con María a su maravilloso tren y llegar hasta un Barco, y montar en un burro y hacer florecer una hoja de papel; jugar con la luna de María José, y descubrir quién ha sido el que la acuna; despedir al “Crac” a un hombre del Sur, a Maradona, con los versos de dos compatriotas, uno de ellos nuestro Crac Carlos Lesta; tomar el aperitivo y un vino, con nada menos que Francisco Brines, con un Cervantes, invitados por nuestro entrañable Quijote; salir al jardín y escuchar el reloj de Carmen que sigue latiendo en nuestros corazones, mientras suena en nuestro oído el tic tac de sus canciones. Nos hicimos con Yoli eco del éxito que están teniendo las voces de mujeres gallegas en verso, y sentimos los aplausos a esas mujeres que cuando hablan cantan en el idioma más bello, el gallego; llegaron también dulces versos del Sur, de otro Ángel con cabezas que nos enseñó a escribir poemas con las yemas de los dedos, sobre la piel desnuda, versos llenos de vida y ternura; un placer fue compartir con Placeres un poema de cuna hecho por Olga Novo para su hija Lúa; supimos por la directora que el Nobel fue para una poeta, con apellido de Pato, Louise Glück, que entró en nuestras vidas desde el lejano Oeste, haciéndonos felices a los que amamos el verso, desde que los pariera por primera vez otra mujer en Lesbos; pero para poetas, el nuestro, nuestro Paco, que nos deleitó con su vida es verso, extremo que es cierto, su vida es la mirada del poeta que ve abrazarse la vida y la muerte, y nos traduce la vida a versos rotos con besos; de la mano de la Dirección, no perdió ésta la ocasión de hacernos saborear a Raúl Zurita, premio reina Sofía, y allá, por finales de septiembre, Antonio se quitó el sombrero y nos abrió las puertas del otoño, cantando la tristeza de Fonseca y la añoranza por el fondo de una mesa, mesa que aún remembra un turco que forma parte de sus comensales y de nombre Caglar y que nos hizo disfrutar del vuelo de una paloma, que en su pico trajo un mensaje que nos hizo pensar en la negrita entre los términos modernos, y de repente, llegamos al cinco de septiembre, en un recorrido que me ha enternecido, lleno de crónicas con lirismo, con sentimientos, y ¡con amigos!



Como una paloma mensajera sólo me resta deciros, que a todos os quiero, por todos estos pequeños ¡grandes momentos!, en los que me habéis hecho sentir parte de una revista semanal, de ensueño; en la que hoy podemos brindar por todos los premios que han regado nuestro universo, y por mantener vivo el rincón del fondo hasta el año nuevo, esta vez no será bisiesto, y lo celebraremos, estoy segura de ello, en primavera, con besos y versos, antes de partir hacia mi isla, llevándome en la mochila la mejor revista de correos que hay en este mi querido rincón que ya es parte de mi corazón, gracias a todos, por todo, feliz navidad y versos nuevos.

Rosalía Ajamil 


domingo, 13 de diciembre de 2020

Nuestro Macondo, sábado 12 de Diciembre de 2020

 

Muy buenos días mis queridos Diversos. Hoy nuestra crónica  viene de la mano de María Martínez, con aroma de ausencias. Gracias guapa. 
Comentaros que en la cuenta que tenemos nuestro saldo es de 7,76 €, por lo que dejo aquí el número de cuenta ES53 2080 0012 3930 4003 5776 (la cuenta está a nombre de María Martínez y al mío) para los que quieran trasferir 5-10€ para poder seguir manteniendo la suscripción de Espiral Maior., normalmente en enero nos mandan la cuota que incluye unos cinco libros de poesía que compartimos.
Disfrutemos y sonríamos en estos tiempos en los cuales son muy necesarios los besos y los versos.
Ángeles.


Neste tempo de ausencias sen apenas despedidas quero
adicar este pequeno relato en agradecemento á mellor
herdanza que nos puideron deixar moitos dos que á forza
marcharon que é formar parte do que somos, será por iso
que “jamás se recuerda lo que nunca se olvida”.
Para todos os poetas tan diversos e añorados, en memoria
dos versos que pronto volverán a empapelar as paredes do
Macondo,
beixos miles, aínda sexan a través da máscara seguiran
sendo beixos!




FLORES DE PAPEL




Só foi preciso para entrar empurrar lixeiramente a porta de
ferro. A cancela estaba aberta, como soe ocorrer, en aldeas
de non máis ca dúas ducias de habitantes. Verán en
Valdeorras, só despóis do solpor baixase dos trinta. Dentro
todo é mármol e granito. Todo é silencio, que cala o presente
e da voz os momentos vividos, cos que antes vivimos. No pobo
xa suman máis os mortos que os vivos. Camiñando entre as
lápidas chego a da familia. Séntome ó carón e comezo o meu
relato: “Unha nena que leva o meu nome viaxa no tren
comarcal. Unha nena da que me separan máis ca tres décadas
e ademáis do nome leva os meus apelidos. Parte das súas tías
avoas acompáñana compartindo con ela a ilusión e as ansias
por chegar. A Coruña vaise perdendo tras o traqueteo e as
vías que bailan entre curvas. - A avoa espéranos na aldea
xunto coas dúas vacas. Fai uns días chorei acongoxada pola
recente morte da burra que tantas veces montara. As
bágoas cesaron cando ela me prometeu que se non había
burros dispoñibles na aldea poría as alforxas nunha das
vacas. Seguía sen entender como a pesar de seren tan listos
lles chaman burros e por qué as mulleres montánse coas dúas
pernas no mesmo lado. Conteilles as miñas tías algúns dos
plans: facer tirapedras con guantes, tobogáns de pallas no
palleiro, barcos de pao para navegar no lavadoiro, lecturas no
balcón: “Momo”, “Sólo un pie descalzo”, “Veva”... coa serra da
Enciña da Lastra observándome. Recordei como baixar as
escaleiras silenciando os pasos, ir buscar os rapaces e
bañarnos no río sen que se percatan de que non durmía siesta
(isto non llo contei a elas)-. Cada mes de Agosto quería estar
alí, no pobo coidábame soa. Hoxe sei que foi grazas a elas,
que tanto coidaron de min”. Ao rematar o relato córtoo en
tiras de papel. Pego os extremos e os coloco en forma de
pétalos. Remato as flores con botóns no medio. Colócoas nos
xarróns. Aínda que os mortos non falan hai palabras que se
escoitan sen ser lanzadas ao aire, aloumiños que sen tocar a
pel fan vibrar o corpo. Salgo, non sin antes arrimar a porta
sen pechar a cancela.




sábado, 5 de diciembre de 2020

Nuestro Macondo, Sábado 5 de diciembre de 2020

 Mis queridos Diversos. En este sábado de viento y lluvia, cómo decir que nos echamos de menos. 

Digámoslo con blancos y silencios.











Y nos volveremos a encontrar entre besos y versos.
Ángeles

domingo, 29 de noviembre de 2020

Nuestro Macondo, Sábado 28 de Noviembre de 2020

 

Buenos días mis queridos Diversos. Toca seguir añorando mañanas de sábado y aromas compartidos. 

Hoy nos une una voz que nos habla de sentimientos del sur y de fútbol, de nuestro querido Carlos Lesta.

Siempre compartiendo entre besos y versos.

Ángeles,




Un sábado más en el que será este medio el que nos junte en una esquina del ciberespacio, seguramente también iluminada por la mirada de Gabo.

Sé que se alarga este estado de letargo consciente, de subibaja de cierres y aperturas, de peleas inútiles entre libertarios carentes de empatía, gentes que se ven obligadas a utilizar medios de transporte colmados, de represiones de escarmiento y de no represiones de espanto.

Y entre todo eso, a quienes el futbol nos mueve el alma, se nos murió el Diego.

Y quiero hacer una reflexión acerca de la proyección de la figura de Diego Maradona.

Una pléyade de medios expusieron descarnadamente las debilidades de Diego, su relacion con la cocaina, con la bebida, con el desenfreno, con sus amistades mafiosas. Ocultaron su lealtad a sus orígenes, su mordacidad para expresar una posición política que casi siempre significó estar lejos del poder.

Fue un gran futbolista, quizás el más grande hasta ahora. Y fue un hombre del Sur, conciente de esa “australidad tercermundista” y quizás también por eso, se haya erigido en mito.


De “Agencia Paco Urondo”:

Siempre atento a los sentires de su tiempo y su pueblo, Mario Iaquinandi dedicó a Maradona un poema donde laten el fútbol, la cultura popular y la historia argentina. Fue incluido en la antología “Cantos del habitante”, publicado en 1992, tras la muerte de su autor, bajo el sello LetravivA.

Aquí lo compartimos:

Maradona

Tu cáliz de sudor

está chorreando sobre el tapete verde.

Y hay un alma de cuero y un corazón rugido

que hacen temblar la tarde apretujada.

Gritad y vivid: Este es mi ingenio.

Yo soy, porque Dios quiso,

dos piernas supersónicas y un miedo que se vuelve

                                                               /gambeta

cada vez que el hachazo siniestro de otra pierna

busca tronchar mi sueño.

Vengo… de donde vengo.

Mi infancia es una historia donde no cabe el dólar.

Soy… el producto vivo de un sistema gastado

que ya casi no sirve para alumbrar feriados

sobre semanas grises.

Dale Dieeegooo!… Dale Dieeegooo!...

Y yo le doy. Seguro. Le doy hasta que puedo.

La amaso. La converso. Me la llevo dormida.

(Broncaba tanto el hambre!...

Las tripas en “orsai”, la tarjeta amarilla del

                                                 /invierno...)

Ahora, todo el año es domingo.

Para mí, la revancha es un arquero ciego

custodiando tres palos donde meto mi bronca.

No necesito gritos. Ni público. Ni bombo.

Dadme un par de botines y una número cinco…

que tengo que vengarme de ayer. Y de mañana.

Poema incluido en la antología Cantos del habitante (foto), editorial LetravivA, 1992.

Y para cierre, de Andrés Corral Mouriño, aspirante a poeta, nacido en la primavera de 1946

Palabras dulces

En salones suntuosos,

en oficinas amplísimas, lujosas, seguramente entre las nubes

hombres de negocios, muchos de ellos gerentes generales,

presidentes a sueldo de empresas millonarias

deciden que deben hacer que sus empresas, que no son suyas,

incorporen a la sociedad como política de buenas prácticas


Mejorar las relaciones, atender los reclamos de los ciudadanos

cuidar el medioambiente, cuidar el planeta

y más y más hermosas palabras que parecen

palabras de cordura y acaso de esperanza


Mientras tanto

los capataces, los capitanes de pesqueros,

los gerentes que quieren ascender,

nada saben de esas palabras

y nada de esas intenciones.

Siguen talando selvas, envenenando el agua

pescando con prisa y sin pausa

llenando de pesticidas

viviendas, escuelas y sembrados


Esas bellas palabras

esas nobles aspiraciones

chocan con la realidad de ansias de ganancia

ansias de poder

y de locura



Pesca Industrial (Hidroblog)

Hasta el próximo sábado. Y como decía Hugo Guerrero Marthineitz “ si Dios y los hombres lo permiten”.

CarlosLesta

lunes, 23 de noviembre de 2020

Nuestro Macondo, sábado 21 de noviembre de 2020

 

Buenos y soleados días mis queridos Diversos. Hoy nuestra crónica, certera y emotiva, viene de la mano de nuestro Quijote particular, Alfonso Modroño. Sus palabras nos mantienen unidos y esperando que vuelvan nuestras reuniones. 

Mientras tanto besos y versos para todos,

Ángeles.

Macondo, con su sabor a tertulia y café de sábado, parece que se nos hubiese ido, para siempre, a acurrucarse entre las páginas de alguna novela de García Márquez. Ahora, más que nunca, la barrera invisible de un ejército invisible, impide traspasar su puerta. Se han enmustiado los carteles anunciadores de la vidriera y la luz apagada no deja oír el golpear ahuecado del filtro de café sobre la barra del cajón de los posos. El mármol de la mesa del rincón del fondo esta frío sin sus tazas humeantes y sus libros; sin la luz de los flases de las fotos de Ángeles, de Placeres… – No creo que estemos ninguno de nosotros en la mesa que fue a parar a las páginas de la novela de García Márquez— No se escuchan las voces que, en bajo musical, armonizaban sus notas con los agudos de las cucharillas golpeando porcelanas. Se ve a la soledad -- como en pijama -- durmiendo en cualquier parte del espacio silente del local. Los cuadros también duermen, o eso parece; lo cierto es que están mudos, sin ninguna mirada que los acaricie.

Hoy es veintiuno de noviembre, y es sábado. ¡Sábado…!

Siempre habrá, para un Diverso, un Macondo de versos a partir de las once de la mañana de cualquier sábado del año.

Estemos donde estemos, surgirá un poeta que comentar, un poema que leer. Siempre habrá poesía en nuestros corazones a partir de las once de cada mañana de los sábados. Y aun sin mesa de mármol, ni sabor en los labios a agradables compañías, siempre nos quedarán las redes para pescar correos en el Google o textos en WhatsApp.

Hoy le toca a este Quijote, por turno de oficio, lidiar contra el gigante de las letras y, en descomunal batalla, vencer al malandrín que pretenda impedirle llevar versos a su amada Dulcinea de Diversos.

Y sepan “vuesas mercedes” que nadie mejor, para traer sus versos, este sábado, de la mano de un quijote, que un Cervantes: El poeta FRANCISCO BRINES.

El poeta de Oliva –Valencia--, es el flamante ganador del último “premio Nobel” de las letras hispanas: el Premio Cervantes.




Yo sé que olí un jazmín en mi infancia una tarde, y no existió la tarde, escribió en El otoño de las rosas.


Brines es una de las últimas voces que tenemos la suerte de poder escuchar de la denominada generación del 50, habitada por autores como Jaime Gil de Biedma, José Ángel Valente, o Carlos Barral.


Te conoces por el poema, pero no conocías antes de escribir el poema lo que en él escribes”.


La poesía de Brines, a menudo, navega con cierta normalidad por mares elegíacos: “no habría lamento si no se hubiera apreciado lo que ya no está”

Hay en su obra, también, una constante: la dualidad entre las luces y la sombras. La memoria de la infancia, intensa y sensorial, en contraposición al vacío y la desesperanza. Como en este poema de Insistencia en Luzbel (1977):


Los sinónimos

Más allá de la luz está la sombra
y detrás de la sombra no habrá luz
ni sombra. Ni sonidos, ni silencio.
Llámale eternidad, o Dios, o infierno.
O no le llames nada.
Como si nada hubiera sucedido.

Os dejo saboreando este aperitivo delicioso de un poeta que, como los buenos vinos, nunca envejecerá. Sabedor de que abrirá vuestro apetito por descorchar más poemas guardados celosamente en las botellas de los libros de este poeta consagrado.

Mis queridos Diversos, recibid mis abrazos virtuales empapados de versos, hasta que el ejército invisible que nos cierra el Macondo sea derrotado. Ojalá la victoria este cerca y podamos abrir nuestras sonrisas, sin vendas en la boca, y podamos entrelazar nuestros brazos, para vernos fundirnos en abrazos de verdad.

Alfonso Modroño Márquez-

A Coruña, 21 de noviembre de 2020.